La III Asamblea Internacional de la Misión Marista (MIMA) llegó a su fin el pasado domingo 14 de abril en El Escorial (Madrid), después de una semana de intensas reflexiones, intercambios y compromisos. Este evento, que reunió a 119 representantes de las 25 unidades administrativas, las redes maristas, la Administración General, la familia marista y otros invitados, estuvo enmarcado bajo el lema «Somos una familia global», que resonó en cada sesión y conversación.
En su discurso inaugural, el H. Ernesto Sánchez, Superior General, destacó la importancia de caminar juntos como una familia global. Para él, este lema contiene la esencia de la misión marista: un propósito común que nos une más allá de las fronteras geográficas y culturales. En sus palabras, «caminar» representa el movimiento constante que requiere el avance de la misión. Por otra parte, «familia» resalta que se trata de un organismo vivo en el que la diversidad de sus miembros es necesaria para su vitalidad. Finalmente, «global» nos recuerda que somos parte de un solo cuerpo, cuyas partes se encuentran en diferentes lugares geográficos, lo cual ratifica nuestro llamado a construir redes y puentes que nos unan.
La asamblea se desarrolló con cuatro objetivos principales: compartir experiencias, escuchar realidades, discernir prioridades y proponer directrices y estrategias para la Misión Marista a nivel mundial. Estos objetivos se reflejaron en el borrador realizado por la comisión preparatoria, a manera de conclusión del encuentro, y que será enviado a todo el Instituto. Este expone las necesidades más urgentes que seguir atendiendo y las estrategias prioritarias que continuar desarrollando, aunque no las únicas.
- Educación evangelizadora marista de calidad, que forme para el mundo y sea transformadora.
- Promoción y protección de los derechos de la infancia y la juventud.
- Espiritualidad Marista como fuente generadora de sentido y cuidado con la vida.
- Participación y compromiso de los niños, niñas, adolescentes y jóvenes, a través de espacios de escucha activa y sensible.
- Cuidado de las relaciones familiares para nutrir a estos mismos menores de edad.
- Cuidado de nuestra casa común.
- Promoción de la salud mental, bienestar y cuidado integral de las personas.
Tras las huellas de Marcelino
Un momento destacado de la clausura fue el lanzamiento oficial del documento Tras las huellas de Marcelino Champagnat: Misión Educativa Marista, que celebró, en 2023, 25 años desde su primera publicación. Esta actualización no solo honra las intuiciones fundamentales del texto original, sino que también incorpora nuevas realidades, propuestas y orientaciones desde una visión contemporánea. “Es un texto, que además de inspirador, busca alentar el camino de los maristas en misión ‘mirando más allá’, en un futuro lleno de esperanza y de retos”, comenta el H. Ernesto Sánchez en la presentación del documento.
Al cerrar la asamblea, los participantes, queriendo concretar el deseo de nuestro fundador “Ojalá se diga de vosotros, mirad cómo se aman los Hermanos… los Maristas de Champagnat”, entonaron una canción (que compartimos a continuación), y enviaron un mensaje a todos los agentes de la misión marista en el mundo, que se recibirá en breve a través de las redes sociales del Instituto:
Somos familia global, somos hermanos y hermanas,
somos tus ojos y oídos, tus brazos y tu corazón.
En la misión, Champagnat.
En la misión.
En resumen, la MIMA 2024 no solo fue un espacio para compartir ideas y establecer prioridades, sino también una oportunidad para renovar nuestro compromiso con la misión marista en un mundo que necesita más que nunca los valores de solidaridad, justicia y amor, basados y fundamentados en el Evangelio, en la Buena Noticia de Jesús. En palabras del propio Marcelino Champagnat, «Para educar a los niños, hay que amarlos, y amarlos a todos por igual».