Después de haber estado días trabajando en conjunto, creciendo mano a mano y ahondando en el temario y las actividades propuestas podemos decir que la semana pasada concluimos la formación de Educación para la solidaridad y el desarrollo.
Además, anunciamos contentos que el curso se ha cerrado «con un nivel alto de satisfacción según los participantes». Y es que dentro del programa hemos podido disfrutar de visitas, actividades dinámicas y otras propuestas que ayudan siempre al aprendizaje y dejan buen sabor de boca.
Destaca la visita que el pasado miércoles hicimos a la obra social marista Lavapiés y al barrio donde se sitúa. Estos, entre otros, fueron algunos de los lugares especiales donde hemos podido «leer» la realidad de un modo complementario a «estar sentado» en el aula.
Los participantes señalan que cosas como estas ayudan a completar de manera realista la formación, cumpliendo no solo con los objetivos sino mirando más allá.
Por otro lado, los dos últimos días de formación contamos con la presencia de profesores como Rosa, Casamayor y Paredes. Esta aportación humana supuso la oportunidad de hacer una revisión personal y grupal de lo que impulsamos como «solidaridad» en nuestras aulas.
Desde MRE damos la enhorabuena a todos los participantes, porque ha sido, sin duda, un curso motivador que tendrá recorrido en el ámbito local.
