El mes de abril ha visto de nuevo una formación para tutores de las etapas educativas de infantil y primaria. Veintiocho tutores de las provincias maristas de Compostela, Ibérica y Mediterránea asistieron a este encuentro que tuvo lugar en Valladolid, España.
Durante el curso, se compartieron experiencias educativas y se realizó una aproximación a las dimensiones de identidad, desde la individualidad al igual que desde el punto de vista del educador marista. También se abordó la gestión de equipos docentes, la noción de escuela marista inclusiva, la mirada apreciativa y la dinámica de la relación tutor-familia. Como es habitual los propios participantes animaron los primeros momentos de la mañana con oración y acción de gracias.
Otro de los temas relevantes de la jornada fue el relacionado con las buenas prácticas, gracias a ello varios de los asistentes compartieron experiencias sobre sus respectivos centros. Aunque se trató de cinco días de formación, el tiempo fue corto para compartir, no obstante, hubo momentos informales de intercambio, como la visita turística al centro histórico de Valladolid y la cena del miércoles en Mucientes. Tiempos como este hacen de las formaciones un lugar para la convivencia y promueven la renovación de ideas y proyectos.
Como siempre, el grupo de acogida, en este caso la comunidad educativa del Centro Cultural vallisoletano, se hizo presente con el mejor espíritu de alegría y servicio, poniendo a disposición de los participantes, espacios importantes para la vida espiritual de la comunidad como la sala de interioridad y la capilla.
De esta formación se destaca principalmente la unidad, lo cual confirma la certeza de que hay un caminar educativo común en todos los centros representados por cada uno de los participantes y de que, a pesar de la distancia, es evidente que todos formamos parte del mismo carisma marista.